A pesar del retraso respecto al límite establecido por la Ley de uso, protección y promoción de las lenguas propias de Aragón (en su disposición adicional segunda), el también demorado Consejo Superior de Lenguas de Aragón, trabaja durante estos días en la configuración de los entes normativos oficiales de nuestros dos idiomas patrimoniales minoritarios[…..]. Se tratan, pues, de la Academia d’a Luenga Aragonesa y la Acadèmia Aragonesa del Català, denominaciones éstas recogidas en su versión castellana en la mencionada ley, y que nos permitimos transcribir traducidas en sus respectivas lenguas por simple coherencia (Posiblemente en la fecha que sea publicado este artículo ya sepamos los nombres de sus primeros académicos). […..]
Precisamente por ello querríamos reflexionar sobre algunos principios que consideramos esenciales para su exitoso establecimiento. Uno ya lo hemos señalado, y se trata de sus nombres, porque ¿se imaginan ustedes la Real Academia Española luciendo una denominación oficial en inglés? Ciertamente sería caricaturesco, y por consiguiente también lo sería si, independientemente de la oficialidad exclusiva del castellano en nuestra comunidad, ambas instituciones no fueran (re)conocidas oficialmente en sus respectivos idiomas, aquellos que a su vez deben de “fijar, limpiar y dar esplendor”. En este sentido los responsables de éstas tendrán que ser personas “de reputada solvencia” (artículo 15.3) y, obviamente, hablantes de dichos idiomas (¿no?), porque ¿concebirían ustedes, por ejemplo, que los miembros de la RAE no hablarán español? Rotundamente, no. Y aun más, estos académicos, indiscutiblemente, habrán de considerar el aragonés y el catalán como lenguas (“dialectos”, eso sí, del latín) sin hacer uso de otros ambages calificativos usados por algunos hispanistas zaragozanos, en contra de lo que la comunidad romanística internacional califica hace tiempo como idiomas, y guardando la coherencia con las denominaciones oficiales de las instituciones que representan. Así pues, confiamos que en el caso de la Academia d’a Luenga Aragonesa los nombres de sus primeros miembros sean escogidos de entre las cuatro instituciones que hasta el momento se han ocupado en su conjunto y con exclusividad (aunque con diferentes grados de dedicación y de recursos humanos y económicos) a su investigación y difusión: la Universidad de Zaragoza, y las asociaciones privadas Consello d’a Fabla Aragonesa (CFA), Sociedat de Lingüística Aragonesa y el Estudio de Filología Aragonesa – Academia de l’Aragonés (EFA), ésta última, por cierto, autora de la mejor y más completa propuesta ortográfica hasta la fecha publicada, que haya tenido la tan delicada lengua aragonesa (http://www.academiadelaragones.org), y todas sus hablas vivas.[…..]
Porque, ¿qué es si no lo que le pedimos los hablantes de español a la RAE? Pues sencillamenteque fije, limpie y de esplendor a nuestra lengua castellana. Y eso mismo es lo que esperamos los aragonesohablantes por parte de la Academia de la Luenga Aragonesa (ALA) y los catalanohablantes de Aragón de la Acadèmia Aragonesa del Català (ACAC). Así pues, si en el caso del catalán la flexibilización del estándar actual y por ende la consolidación de las variaciones regionales aragonesas, en igualdad de condiciones que las barcelonesas, baleáricas y valencianas habría de ser el eje central de l’ACAC, en el caso del aragonés, a parte de “limpiarlo” de vulgarismos y “darle esplendor” con la fijación de un modelo estándar y posibles paraestándarsc), […..] un primer cometido de la ALA, de insdiscutible y vital urgencia, ha de ser la aprobación de una normativa gráfica común (¡ahora hay 4 diferentes!). Para ello no dudamos que será tomada muy en cuenta la mencionada propuesta del EFA–muy próxima a la defendida por la Sociedat (2006), y que completa y mejora la del Grupo d’Estudios de la Fabla Chesa de 1990–, ya que ésta supera la tan innovadora y rupturista ortografía de 1987. […..]
Y aunque eso no me hace negar mi total admiración y reconocimiento a la magnífica labor en pro de la normalización del aragonés que ha llevado a cabo durante años el Consello (cosa que me llevó hace años a asociarme), tampoco no puedo esconder mi firme y total apoyo a la grafía propuesta por el EFA, no sólo por su fidelidad a la tradición gráfica del idioma aragonés (tema que sigo estudiando) y su incuestionable coherencia, sino a la manera tan modélica a cómo ha sido redactada y tomado en cuenta la opinión de un gran número de hablantes patrimoniales, escritores e investigadores vinculados a los valles de Echo, Ansó, Panticosa, Bielsa, Chistau, la Fueva y Benasque, la zona de Ayerbe y las comarcas de las Cinco Villas, Sobrarbe y Ribagorza, en donde más vivamente se conserva la lengua aragonesa, en sus diferentes variantes………………………………………………
Ta leyer tot l'articlo punchar asti: Revista 89 de Guayente, pachina 9.
University Of Kent At Canterbury (Reino Unido)
Fuente: www.guayente.org
No hay comentarios:
Publicar un comentario